"El país de las mujeres"

Gioconda Belli
La poeta y novelista, Gioconda Belli nació en Managua. Participó, desde el año 1970 en la lucha contra la dictadura de Anastasio Somoza, como miembro del Frente Sandinista. Vivió exiliada en Mexico y Costa Rica. Ocupó varios cargos partidarios y gubernamentales en la Revolución Sandinista en los 80. Es madre de cuatro hijos y desde hace algunos años divide su tiempo entre California y Managua.
Junto a Ernesto Cardenal y Claribel Alegría, inició la renovación de la poesía en su país. Un marcado acento 
erótico impregna buena parte de su obra, aunque la última producción denota una gran  preocupación por los 
cambios políticos de su patria.


En “El país de las mujeres”, se especula sobre cómo sería un país gobernado exclusivamente por mujeres.
Las integrantes del Partido de la Izquierda Erótica (PIE) quienes ganaron las elecciones en Faguas (Fuego y Aguas) un pequeño país latinoamericano, utilizan todos los defectos y cualidades considerados femeninos para cambiar el rumbo de su país.
Las mujeres han tomado el poder e iniciado una serie de profundas reformas que instalan un sistema de gobierno que ellas llaman "felicismo".
““Felicismo”, como la palabra lo dice, es la felicidad, o sea la felicidad como objetivo de todo lo que hace un gobierno, porque todos los gobiernos se ponen otros objetivos, y ese que es tan obvio, que es hacer feliz a la gente, porque la felicidad no está determinada por el mayor producto interno bruto. Las mujeres por lo que se preocupan es por mejorarle la vida de todos los días a la gente.”
¿No es eso lo que debe hacer un gobierno…?
La protagonista, la presidente Viviana Sansón y sus ministras, deberán sobrellevar los ataques de sus enemigos y enemigas. No todas las mujeres, ni siquiera las ultra feministas, están de acuerdo con esta reforma. Los hombres han sido mandados a su casa por un lapso de seis meses, con sueldo pago, a hacerse cargo de la casa y los niños…
No permitirán que nadie les diga qué hacer ni cómo llevar adelante la tarea…
Pretenden tratar al país como si se tratara de una casa y una familia a la que se debe cuidar y guiar con amor, como bien lo hace una madre.
Durante una manifestación, la Presidenta Viviana Sansón sufre un atentado. Un vendedor de raspado (refresco compuesto de hielo troceado con jarabe de frutas), José de la Aritmética*, la asiste. El libro se desarrolla en lo que sucede el día siguiente del atentado.
José de Aritmética: se llama así porque su madre quiso en realidad ponerle José de Arimatea (propietario del sepulcro en el cual fue depositado el cuerpo de Jesús) y por una confusión terminó llamándole Aritmética, lo que condicionó al pobre hombre a hacer cálculos…
La novela está llena de deliciosas pequeñas historias como esta de José…
Hay una visión de la mujer diferente que no es desde el clásico feminismo.
La autora pretende hacer pensar… “tirar ideas para empezar a cranear otras cosas”, “no cambiar solamente cómo votamos, sino cómo vivimos.”
¿Será Faguas un mejor país? ¿Sobrevivirá  Viviana Sansón al atentado?
Una poderosa novela que según su autora dice ser para mujeres y recomienda que los hombres no la lean…


Reina