Infierno... Cap. 16 - El sendero…

Di media vuelta y me dejé guiar por las luces y el sonido de las arenas….
El camino era largo y solitario…
-¿Cómo llegué hasta aquí..?- pensé, mientras caminaba…-¿en qué momento dejé de sonreír…? ¿cómo me dejé arrastrar hasta aquí abajo…?
Mucho tiempo sola… mucha oscuridad… pocas horas de sueño… ingredientes fundamentales para una buena sopa… decía un amigo…

De todas maneras no llego a ninguna conclusión…

Julia y Valentin aparecieron de repente entre mis pies, enredándose en cada paso, como buenos gatos mimosos…

Seguramente Bee los mandó para que me acompañen… es buena esa demonio después de todo, aunque intente disimularlo…

Caminaron delante de mí un buen tramo… siempre siguiendo las pequeñas luces, hasta que llegamos a una bifurcación…. 

Hacia la derecha continuaban las luces…
Julia y Valentin se detuvieron a la izquierda, esperando a que yo les dijera qué camino iba a tomar…
Y ahora qué hacer….?
Seguir el camino iluminado o a los gatos enamorados….?

Me salió en verso… pero esto no es un verso, esto es real…


Hasta ahora Bee no me había defraudado, siempre intentó ayudarme, como pudo… más de lo que le estaba permitido… me dejó una chispa, me contó secretos, me mandó a Julia para que me acompañe… no me dejó sola…

Miré a los gatos a los ojos, esos ojos infernales y les dije…
-A la izquierda si me quieren acompañar….
Y corrieron delante de mí tan rápido que los perdí de vista….

Seguí detrás de los gatos… pero despacio, el camino allí no estaba iluminado, no sabía que pisaba pero no era liso y parejo, tampoco veía si el sendero era ancho o qué había a los costados, así que caminaba con prudencia pero siempre hacia a delante…

Los cinco puntos volvieron a encenderse, entonces pude ver… lo que pisaba eran piedras amarillas, como una mezcla de azufre y arena… y a medida que avanzaba iban disminuyendo su tamaño y el sonido del tiempo se hacía más cercano…
El camino era angosto y a sus costados sólo había un inmenso abismo…

Otra vez estaba sola…

Ya me estoy cansando de éste estado…
Durante un tiempo tuve la compañía de Bee, Julia, Bob, la chispa, Valentin y hasta Mandrake, a quien no tuve oportunidad de ver de cerca, pero no me dejaban sola mucho tiempo… podría decir que son mis amigos infernales…

Al quedarme sola y en la oscuridad, la mayor parte del tiempo pensaba en él… y si pasaba mucho tiempo pensando en que ya no estaba conmigo, perdía las fuerzas para seguir… entonces me sentaba un rato, tomaba un puñado de piedras amarillas y jugaba con ellas en mi mano…

En una oportunidad tiré una por el abismo… no la escuché caer…….
...
No podía permanecer quieta mucho tiempo porque las arenas corrían hacia mí y me cubrían… así que debía ponerme en marcha y seguir…

En uno de mis descansos encontré un piedra muy particular, tenía la forma de un pequeño pez amarillo….

Caminé varias horas… o varios días… no sé… sin la presencia de Bee no podía contarlos…
Arena, pez… quizás este lugar haya sido el fondo de un mar en otros tiempos…
Durante el trayecto recolecté varias piedras con formas de caracol, algún que otro pez y hasta una moneda que parecía ser de oro…
Definitivamente estaba en el fondo de algún mar… un mar infernal....