Infierno... Cap. 20 - Perlas de recuerdos

No sé cuánto dormimos los gatos y yo… la luz era tan intensa que hacía doler los ojos… todo duele aquí abajo….
Llegué a pensar que esa luz ocultaba algo… algo había allí que no querían que viera… no me iba a ser tan fácil cumplir con esta tarea…
Pero ¿ y cuál era ahora la tarea….?
Antes sabía que debía esperar… pero ahora ni siquiera sé qué debo hacer….

Los gatos se levantaron y corrieron como siempre, no alcancé a ver hacia dónde…
Otra vez estaba sola… dicen que están siempre, que no se fueron nunca… pero no puedo verlos… cuando más los necesito desaparecen…

Quizás estar siempre sola sea mi destino… quizás sea esto lo que tenga que descubrir aquí….

Tengo que encontrar la forma de salir…
Nadie vendrá a buscarme… la espera es inútil… todos están muy ocupados para bajar por mí… mis hijos vendrían pero no saben que estoy aquí y mejor que no lo sepan, no quiero que conozcan el infierno…

Y él… no me quiere… ya se olvidó de mí… y tiene su propio infierno… tampoco vendrá… no tiene sentido esperar por él…
Pensar que bajé aquí por él… y bajaría mil veces si fuera necesario… pero no me quiere cerca… no sé por qué... quizás nunca lo sepa.........

Así que… a ponerse en marcha… basta de esperar a quien no vendrá… hay que tratar de salir…..!!!!
En todo caso espero arriba, al solcito y mirando el cielo…. mientras esté viva queda una esperanza… pero de aquí me voy ya…

¿ Hacia dónde….?
-Julia…!!! Valentin…!!!! Gatos…!!! ¿ Dónde están…?

El ruido de las arenas correr era bastante intenso pero alcancé a escuchar el maullido de Julia… creo que viene de la cascada…
No podía verla pero me puse de pie y me encaminé hacia la cascada orientándome por el sonido… la luz intensa me impedía ver nada…

No había andado mucho tramo cuando me detuve sin saber por qué… adelanté mi pie derecho tanteando y no había nada… Otra vez estaba al borde de un abismo…
Otra vez sentí la soledad y la profunda tristeza….
Otra vez olvidé que iba tras de la salida…
Otra vez recordé mis sueños perdidos y lágrimas aparecieron en mis ojos…
Di un paso atrás y me detuve a verlas caer…. una a una caían y se unían envolviendo a otra como formando una perla… y en un rato el lugar estuvo sembrado de brillantes perlas que dibujaron en mí una sonrisa y dejé de llorar… era lo único que podía ver… mis lágrimas, mis sueños convertidos en perlas…

De repente escuché una voz muy intensa y muy grave…. no era la de Bob… era una voz muy bonita que me trajo antiguos recuerdos…...

Pintura: La espera
Pintora: Elena Soto Wilson