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miércoles, 4 de febrero de 2009
El tamaño de las personas
Una persona es enorme cuando habla de frente
y vive de acuerdo a lo que habla.
Cuando trata con cariño y respeto a los demás.
Cuando mira a los ojos y sonríe inocentemente.
Una persona es pequeña cando sólo piensa en sí misma
y les hace creer a los demás que piensa en ellos.
Cuando se comporta poco gentil, cuando no apoya,
cuando abandona a alguien en el momento en que tenía
que demostrar lo que es importante entre dos personas:
amistad, compañerismo, cariño, respeto, amor...
Una persona es gigante cuando se interesa por tu vida,
cuando sueña junto con vos...
Cuando trata de entenderte aunque no piense igual.
Una persona es grande cuando perdona, cuando comprende,
cuando se coloca en el lugar del otro antes de juzgar...
Una persona es pequeña cuando quiere quedar bien
con todos, cuando maneja a los demás como titiritero,
cuando mira desde un sólo punto de vista, el suyo.
Una misma persona puede variar de grandeza a pequeñez
dentro de una relación, puede crecer o disminuir
en un corto espacio de tiempo.
Una decepción puede terminar con el respeto por alguien...
Las personas se agigantan y se encogen ante nuestros ojos...
Una persona es única al extender la mano
y al recogerla repentinamente se convierte en otra...
Es dificil vivir con esta elasticidad...
No es la altura ni el peso, la belleza, ni un título, ni mucho
menos el dinero lo que convierte a una persona en grande.
Es su honestidad, su decencia, su amabilidad y
el respeto por los demás lo que la hace crecer.
Extraído y modificado de un texto de Shakespeare
Reina
Etiquetas:
Reflexiones
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