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jueves, 22 de enero de 2009

El Olvido





Repetidamente la literatura y la historia nos hablan de
personas que no queriendo recordar aquello que les hace
daño, buscan la forma del olvido.

Una historia cuenta que aquel dispuesto a olvidar debía
bañarse en las aguas del Leteo, río del olvido.
Otra dice que con sólo beber un sorbo de su agua ya no se
recordaría para qué ...

Lo que no recuerdo es si se perdía por completo la memoria
o podía seleccionarse aquello destinado a olvidar,
quizás mojando sólo un dedo o la punta del cabello…

Será que ya anduve por esas aguas…?

Algunas hablan sobre ciertas flores cuya fragancia hacía olvidar
cualquier pesar.

Pero la que más me gusta y leí hace pocos días,
es la del Libro del olvido…

Un libro que página a página iba eliminando recuerdos.
No se sabe a ciencia cierta de qué trata el libro,
ya que nadie lo recuerda y aquellos que han logrado terminarlo
no pueden dar testimonio de su existencia.

Por lo tanto se hace difícil encontrarlo…
Se dice que quienes no paran leer es porque buscan
incesantemente el libro del olvido…

Quizás lo hayan leído ya, y no lo recuerden…


Nos empeñamos en olvidar...

Nos empeñamos en olvidar rápidamente
y al final muchos de nuestros recuerdos se borrarán
aunque queramos retenerlos...

Nos empeñamos en olvidar y al fin y al cabo
somos nada más que un manojo de recuerdos……


Reina

1 comentario:

  1. Según transcurre el tiempo siento más lo que tus palabras dicen: sí, que, según pasan los años y vivimos las experiencias, al final, somos el resultado de lo vivido, y ese resultado el contenedor de nuestros recuerdos. La mente es frágil: "estamos condenados a repetir de nuevo la historia". Eso, personal y socialmente, es algo que no deberíamos olvidar nunca.

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